Cuando el miedo se vuelve tangible, atrapado en nuestro ser. Un miedo que no se expresa abiertamente, sino que se oculta para disimular. Un miedo que se convierte en un compañero silencioso, un aliado que nos susurra día a día.
Convocatoria Juevera de Nuria.
El tema: Miedo
He aquí mi propuesta. Espero que te guste, Nuria.
Micaela se despertó exaltada de una pesadilla. Había tenido un accidente de tráfico grave. Se veía tirada en el suelo con un gran charco de sangre y alrededor suyo sanitarios y dos ambulancias. Veía y escuchaba la escena desde arriba. La metieron en la ambulancia y la sirena sonaba atronadora. Este estruendo la despertó. Sudaba y sintió un miedo profundo que le recorría todo el cuerpo. Se palpó para corroborar que había sido un sueño.
Ignacio miraba por la ventana, en la plaza había mucha gente divirtiéndose con las fiestas del pueblo. A él, el miedo le agobiaba desde que su padre padecía Alzheimer. No sabía lo que le depararía el día y le costaba asimilarlo. Su padre gimió al fondo de la habitación e Ignacio se acercó para ver qué le sucedía. Los ojos del padre le miraron con ternura y acarició la cara de su hijo con su temblorosa mano.
- Hola Nacho, has venido - Le dijo sonriente.
A Ignacio se le saltaron las lágrimas.
De pronto escuchó un estruendo en la plaza y levantó la persiana para mirar. Toda la plaza estaba inundada y el agua llegaba hasta el suelo de su balcón en el primer piso. Un miedo atroz la devoró. Decidió subir al ático. Llenó una maleta con latas y botellas de agua y subió pensando que en el séptimo piso estaría a salvo. Una vez allí solo podía pensar en una cosa, no sabía nadar y en los armarios no tenía ningún flotador.
Dimitri llevaba 5 años viviendo en un pueblo perdido de Soria con su familia y su ganado. Aquel día llegaron dos forasteros vestidos de negro y sintió todos los horrores causados en aquella guerra. Sabía que era su fin...
O no...
Resulta que eran los parientes de la Fernanda que había fallecido el día anterior y venían al funeral…
Imágenes tomadas prestadas de OpenClipart-Vectors y ambermb en Pixabay
Tengo otros blogs, si te apetece visitarme son estos que te pongo más abajo
Ha sido todo un placer leerte. Has hecho una convocatoria muy amena, tus cinco micros son al cual menor. Me quedo con todos. Un saludo y felicidades.
ResponderEliminarMuchas gracias Campirela. Me alegra mucho que te haya gustado. Abrazo
EliminarHola Amaia, en tu primer texto Micaela siente un miedo que parece acosarla en sueños, el miedo a un accidente de tráfico y sus consecuencias.
ResponderEliminarEn el segundo relato, entiendo demasiado bien a Ignacio pues mi madre murió de Alzheimer y aun no lo he superado. Es muy duro y el miedo que sientes a que el enfermo no te reconozca es horrible, pero cuando sucede es como si te arrancaran el alma, algo se desgarra dentro de ti. La de lágrimas al igual que Ignacio que habré soltado.
En el tercer relato, el miedo que siente Emilia a que el agua llegue al ático porque no sabe nadar y no tiene flotador está muy bien desarrollado; se percibe su angustia, su miedo.
El cuarto y quinto que están enlazados, es por un lado el miedo que siente Dimitri al ver a esos forasteros vestidos de negro y creer que era su fin por culpa de la guerra, pero le das un giro y resultan que son los parientes de Fernanda que vienen al sepelio.
Sinceramente, te has lucido con todos y cada uno de ellos, en cada historia es palpable el miedo por lo que cumples con creces el objetivo de la convocatoria.
Me han encantado.
Un fuerte abrazo
Nuria, muchísimas gracias por tus palabras que tanto me animan.
EliminarMe alegra mucho que te haya gustado.
Un fuerte abrazo y seguimos :-D
Genial todos los textos, y en especial los dos últimos, que arrancan una sonrisa final.
ResponderEliminarMe alegra mucho que al final hayas acabado con una sonrisa. Abrazo grande
EliminarMuy buena idea de utilizar las letras de miedo para enlazar las cinco historias. Un abrazo Amaia
ResponderEliminarMe alegra que te guste. Abrazo grande
EliminarMIedo a la muerte, miedo a la enfermedad, miedo a las catástrofes naturales, miedo a la irracionalidad de la guerra, en definitiiva, MIEDO. A mí me parece el miedo a la devastación que el Alzheiimer provoca, el peor de todos. Nos arrebata aquello que nos define como humanos arrebatando de paso la vida del cuidador/a.
ResponderEliminarMe ha gustado tu acróstico de relatos sobre el miedo.
Un abrazo.
Muchas gracias Pepe. Si, el miedo al Alzheimer, al que veo acercarse, en un familiar muy muy querido, me asusta mucho.
EliminarAbrazo grande
Great blog
ResponderEliminarGracias Rajani. Saludos
EliminarPlease read my post
ResponderEliminarHe pasado por tu blog y me ha gustado. Tienes mi comentario.
EliminarMuy buenos Amaia, vas creando la atmósfera para visualizar y sentir todos los miedos que vas presentando y ese final inesperado, el miedo se transforma en un acompañamiento en tan triste momento, estupendos relatos, abrazo grande Themis
ResponderEliminarMuchas gracias Themis. Abrazo grande
EliminarMuy bien enlazadas las letras de miedo y, como nos tienes acostumbrados, excelentes relatos!! 😉 Saludos!! 🙋♂️🙋♀️
ResponderEliminar¡¡Muchísimas gracias por tus palabras de ánimo que llegan genial!! Abrazo grande
EliminarUn placer que te hayas enrolado en este grupo de Jueveros, con unas situaciones de miedo muy reales y originales en su presentación.
ResponderEliminar¡Bienvenida!
¡¡Muchas gracias Tracy!! Abrazo grande
EliminarUn abanico compuesto de diversos miedos confirmados por las letras iniciales de la temida palabreja: creo que nadie puede sentirse exento de alguna debilidad que lo atemorice, en eso todos somos semejantes. Un abrazo desde el sur
ResponderEliminar¡¡Muchas gracias Mónica!! Así es, hay tantos miedos que varios de ellos nos acechan a lo largo de la vida. ;-)
EliminarAbrazo grande
Muy curiosa la presentación de tu relato, y el desenlace me ha parecido sencillamente genial! Efectivamente cada uno tenemos infinidad de momentos en la vida para encontrarnos con nuestros miedos! Nos entrenamos toda una vida para aprender a afrontarlos! Un abrazote!
ResponderEliminarAsí es. Vivimos muchos años luego pasaremos muchos y diversos miedos. Abrazo grande
EliminarEstupendo relato que retrata los distintos tipos de miedo que podemos sentir. Buena aportación. Un abrazo!
ResponderEliminarlady_p
Muchas gracias lady_p. Abrazo grande
EliminarEs el miedo puro a morir, tal cual. Tus protagonistas adquieren desde el primer momento la dimensión de personas con miedo que deciden reaccionar cada uno a su manera pero siempre dentro de la desesperación e incertidumbre que el miedo les produce.
ResponderEliminarElegir las iniciales de la palabra "miedo" para adornar tu relato me parece de lo más original y atractivo. Es una presentación muy original.
Lo que escribes es siempre ejemplo de las buenas ideas que cultivan tu mente y que nos regalas para nuestro disfrute, el de quienes sabemos apreciar tu calidad literaria, que debemos ser una legión.
Enhorabuena por tu aportación.
Un abrazo.
¡¡Marcos!!
Eliminar¡Muchísimas gracias por tus agradables palabras que tanto me animan!!
Abrazo grande
Qué gozada leer tus relatos, Amaia!!!
ResponderEliminarY es que hay tantos miedos.
Una excelente aportación.
Un gran abrazo
Muchas gracias Carmen. Abrazo grande
EliminarCinco micros a cual mejor, cinco teclas diferente, cinco tipos de miedo diferentes. Son buenísimos! Besos.
ResponderEliminarMuchas gracias Molí. Abrazo grande
EliminarTodos los microrrelatos estaban relacionados, ¡qué genial forma de plantear distintos miedos!
ResponderEliminarEncantada de leerte, Amaia.
Un besazo con una sonrisa feliz ;D
Muchas gracias Dafne. Abrazo grande
EliminarMe gusta que las letras iniciales de cada microrrelato formen la palabra MIEDO.
ResponderEliminarMiedos que algunas veces se disipan, se atenúan. Y en otros casos se confirman. Bien que el cuarto sea continuado en el quinto.
Un abrazo.
Muchas gracias y bienvenido. Abrazo grande
Eliminar¡Hola, Amaia! Has expuesto las mil caras del miedo, afrontándolo con determinación. Valoro que hables del Alzheiimer; también se crea un buen golpe de efecto al final, cuando en un giro logradísimo fusionas por sorpresa la llegada de los parientes al funeral. Buen relato, te felicito. Mari Carmen Caballero Álvarez.
ResponderEliminarMuchas gracias Mari Carmen. Abrazo grande
EliminarAmaia, en verdad te has lucido. Me encantó de verdad. La presentación lo hace especialmente atractivo, las letras ayudan mucho a despertar las ganas de saber lo que estás narrando. Todas, historias reales contadas con total maestría. Felicidades Amaia!
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras Maty. Abrazo grande
EliminarOriginal, y mucho, tu post. Todos esos miedos acaban dejando en el último una sonrisa. Me parece un cierre brillante.
ResponderEliminarMuy logrado. Un fuerte abrazo
Muchas gracias Albada. Abrazo grande
EliminarHola Amaia, te felicito, todos los M I E D O S, nos muestra lo difícil que son atravesarlos, tanto en aquellos que creemos controlar y nos sorprende, y aquellos que nos toman de golpe y nos deja sin salida, muy real, muy bien expresados.
ResponderEliminarUn abrazo,
Muchas gracias Cecy. Abrazo grande
EliminarMis felicitaciones sinceras Amaia, con aplausos incluidos. Cinco minis relatos abordando el miedo en diferentes formas, y cada uno condensado de manera que se palpa lo qué has querido transmitir. Me han encantado, pero mucho...
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Muchas gracias Mila. Agradezco mucho tus palabras. Abrazo grande
EliminarUnos relatos estupendos y un final muy logrado. Enhorabuena, besos
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